martes, 10 de diciembre de 2013

DECLARACIÓN UNIVERSAL DE LOS DERECHOS HUMANOS



El 10 de diciembre de 1948, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó y proclamó la Declaración Universal de los Derechos Humanos. El documento consta de un preámbulo y treinta artículos que recogen derechos de carácter civil, político, social, económico y cultural. Esta manifestación de los países miembros tuvo el propósito de exaltar el espíritu humano, en la búsqueda del reconocimiento de la dignidad. El fin concreto fue prevenir y evitar los actos de crueldad y de barbarie, como aquellos sufridos por la humanidad en el pasado, especialmente durante la Segunda Guerra Mundial.
El Consejo Económico y Social de Naciones Unidas creó la Comisión de Derechos Humanos. A este organismo, estructurado con 18 representantes de estados miembros de la organización, se le encomendó la elaboración de una serie de instrumentos para la defensa de los derechos humanos. Dentro de la Comisión se creó un Comité formado por ocho miembros. El proyecto de Declaración se sometió a votación el 10 de diciembre de 1948 en París y fue aprobado por 58 Estados miembros de la Asamblea General de la ONU, con 48 votos a favor y 8 abstenciones provenientes de la Unión Soviética, de los países de Europa del Este, de Arabia Saudita y de Sudáfrica. Además, otros dos países miembros no estuvieron presentes en la votación.
Los Derechos Humanos encarnan valores conquistados por la humanidad desde la antigüedad en occidente. Su normalización en cambio pertenece a la modernidad, cuando por efecto del Renacimiento, la Reforma Protestante, el Humanismo y la Ilustración, pasamos de una sociedad teocrática a una sociedad enfocada en nosotros mismos. Los derechos humanos son, por tanto, valores de convivencia, fundamentados en la dignidad humana, la razón y la justicia; son un código de conducta a escala planetaria.

100 Momentos que Marcaron el Mundo Contemporáneo

lunes, 2 de diciembre de 2013

1888 FIN DE LA ESCLAVITUD COMO INSTITUCIÓN EN EL MUNDO.



Sorprende mucho pensar lo reciente que resulta este hecho. Hace poco más de un siglo todavía había esclavos bajo el consentimiento de la ley. Pero la sorpresa es doble si se considera que este mismo momento histórico, 1888, puede tener dos perspectivas. Por un lado, podemos notar con horror que la historia de la esclavitud es mucho más larga que la historia de los derechos humanos. En otras palabras, podemos sorprendernos porque algo tan básico según nuestros valores actuales, como lo es la libertad de todos, no se dio bajo el consentimiento de la ley sino hasta 1888. La otra cara de esta misma sorpresa es darnos cuenta de lo mucho que hemos avanzado en los últimos dos siglos. Que la idea de la esclavitud nos parezca un horror es un gran logro si se considera el tiempo que ha pasado desde que la situación era distinta.
Así pues, este evento tiene el poder de hablarnos acerca de velocidad de los tiempos modernos por oposición al ritmo del cambio que hubo en siglos y milenios pasados. Lo más notable en ese sentido que cambios políticos, tecnológicos, económicos y éticos ocurren en sintonía por la estrecha relación entre estos elementos. Es cierto que este movimiento se puede rastrear hasta la Ilustración y, en ese sentido, podría decirse que la abolición de la esclavitud es el resultado de la aparición de nuevos ideales, como la libertad y la igualdad. No es menos cierto, sin embargo, que el fin de la esclavitud coincide con un nuevo orden económico. La esclavitud, un fenómeno que fue muy rentable durante siglos, de repente se volvió obsoleta en el mundo industrializado y fue entonces que nos empezó a horrorizar.
En todo caso, sea por razones ideológicas o económicas, es un motivo de alegría que aquella práctica haya terminado. Eso sí: no olvidemos que todavía hay millones de personas que son esclavos de manera no oficial. Tanto en el mismo Brasil como en otros lugares del mundo hay gente que trabaja en condiciones inaceptables a cambio de comida. La lucha por la igualdad todavía tiene mucho por delante.
        
(100 Momentos que Marcaron el Mundo Contemporáneo).                                                                                                  Casa de la Historia